Hablar de infidelidad es adentrarse en un terreno complicado, donde las emociones y las motivaciones humanas se entrelazan de manera a veces inesperada. Este fenómeno, a menudo envuelto en tabúes y juicios, es mucho más que un simple acto de traición. En este post, dando continuidad al anterior (¿Infidelidad? Repensar el Amor y el Compromiso), vamos a explorar más a fondo las razones detrás de la infidelidad y cómo afecta emocionalmente tanto a quienes la utilizan como estrategia como a quienes la sufren, todo esto desde la mirada de Esther Perel [1], psicoterapeuta belga.
¿Por Qué Sucede la Infidelidad?
Cuando escuchamos la palabra 'infidelidad', la mayoría de las personas pensamos en la traición, en la ruptura de la confianza. Pero, ¿qué lleva a alguien a cruzar esa línea? Las razones son tan diversas como las personas mismas. Algunas de las que explora Perel, son las siguientes:
Búsqueda de Novedad.- En muchas ocasiones, la infidelidad es impulsada por un deseo de experimentar algo nuevo. La rutina puede hacer que una relación pierda esa chispa inicial, y la idea de algo diferente se vuelve muy atractiva. Esto no necesariamente significa que la relación principal esté rota, sino que la monotonía ha hecho que la novedad parezca un escape tentador. Por supuesto que también hay que tomar en cuenta que se trata de una estrategia, que si bien puede estar atendiendo necesidades de una de las partes, a menudo termina también impactando a la contraparte de la pareja.
Insatisfacción en la Relación Principal.- Otro factor común es la insatisfacción en la relación principal. Cuando las necesidades emocionales o físicas no se ven satisfechas, algunas personas buscan lo que les falta fuera de la relación. Esta búsqueda, sin embargo, es más un parche temporal que una solución real.
Factores Personales y Contextuales.- La infidelidad no solo depende de la relación en sí, sino también de la historia personal de cada una de las partes de la pareja. La manera en que una persona ha sido formada o modelada por sus personas cuidadoras (madre, padre, abuelas/os, tías/os), sus creencias y el entorno en el que vive, todo influye en cómo ve la fidelidad y la traición.
Impacto Emocional: Mucho Más que Corazones Rotos
La infidelidad deja una marca profunda en todas las personas involucradas, y sus efectos emocionales pueden ser sumamente impactantes.
Para la persona que utiliza la estrategia de la infidelidad.- Aunque pueda parecer que quien usa esta estrategia disfruta de la situación, la realidad es que la culpa y la ansiedad suelen ser una compañía constantes. El peso de haber traicionado la confianza de alguien querido puede llevar a una espiral de emociones que afectan tanto al bienestar personal como a las futuras relaciones.
Para quien recibe el impacto.- El dolor de recibir el impacto como traición es agudo y puede tener consecuencias duraderas. Sentimientos de inseguridad, baja autoestima e incluso una crisis de identidad son comunes. La infidelidad no solo daña la relación, sino también la percepción que la persona receptora del impacto tiene de sí misma, generando un ciclo de dolor difícil de romper.
La Relación Después de la Infidelidad.- La traición cambia, necesariamente, la dinámica de la pareja. La confianza se quiebra y, en muchos casos, las heridas son tan profundas que la relación no siempre logra recuperarse. Sin embargo, algunas parejas eligen enfrentar la situación, reconstruyendo desde los impactos y creando un vínculo más fuerte, aunque diferente.
Reaccionando a la Infidelidad: El Torbellino Emocional
La infidelidad provoca una reacción emocional intensa y variada, que depende de factores como la personalidad y la historia de la relación y de cada una de las personas de la pareja.
Dolor y Traición.- Estas son las emociones más inmediatas y fuertes. La persona impactada siente una profunda herida que va más allá de lo físico, afectando la confianza en sí misma y en la relación.
Ira y Resentimiento- La rabia es una respuesta natural. Sentir odio hacia la persona que cometió la infidelidad, o incluso hacia la tercera persona involucrada, es común y puede llevar a confrontaciones o deseos de venganza. Acá es importante también señalar lo que proponen las terapias narrativas: 'el problema es el problema, la persona es la persona'. Si pegamos el problema a la persona, la identidad de la persona se ve dañada, y tenemos la tendencia a 'castigar' a la persona, generando impactos y re-impactos en la relación. No es un proceso sencillo, pero se puede trabajar a nivel terapéutico.
Confusión y Desorientación.- La infidelidad deja a la persona impactada cuestionando todo, desde su valor personal hasta la validez de la relación misma.
Impacto en la Relación.- El proceso de la infidelidad puede llevar a la ruptura total de la relación, pero también puede ser el inicio de un proceso de reconciliación. Uno de los elementos clave está en la comunicación abierta y en el compromiso de ambas partes para trabajar en la relación.
A manera de Conclusión: La Infidelidad como Punto de Reflexión
Hablar de infidelidad es hablar de la complejidad humana. Entender las motivaciones detrás de este acto y sus impactos emocionales nos permite ver más allá del simple acto de traición. Al final, ya sea que una pareja decida separarse o trabajar en su relación, lo importante es abordar el dolor y la confusión con compasión y apertura, buscando recolocarse como persona y el crecimiento personal. En última instancia, la infidelidad, aunque dolorosa, puede ser una oportunidad para aprender más sobre nosotras mismos y nuestras relaciones.
Te dejo un abrazo pendiente, hasta que nos volvamos a encontrar por estos espacios virtuales.
Referencias
[1] Perel, Esther (2017). The state of affairs: Rethinking infidelity. HarperCollins.
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